• mié. May 8th, 2024

El valor docente por excelencia es la paciencia, ya que requerimos ésta actitud para poder resolver la dinámica en ocasiones caótica del entorno escolar, así los y las docente debemos ser pacientes mucho mas allá del valor ético para crear algo como un verbo y desarrollar la habilidad de la paciencia, es decir que la paciencia para impartir clases se convierte prácticamente en una competencia.

Ser paciente en la práctica docente significa repetir de diferentes formas lo que buscamos comunicar así como nuestra madre nos decía “se me va a hacer la boca chueca de estarte diciendo”, es decir que repetía constantemente sus indicaciones para formarnos como hijos útiles a la sociedad, de la misma manera los y las docentes debemos repetir indicaciones, explicaciones y criterios para para facilitar el aprendizaje.

En ocasiones como docentes sentimos que podemos lograr un mayor avance en los aprendizajes y debemos rearmarnos de paciencia para buscar una nueva forma de comunicar de manera que nuestro mensaje sea comprendido por todos nuestros niños, niñas y adolescentes considerando que tenemos diferentes estilos de aprendizaje.

Publicado en Yoremia 327 página 13


por Wenceslao Verdugo Rojas

Currículum en http://wmvr.org/trayectoria/