Hacer galletas navideñas es muy fácil, son nutritivas y nos ayudan al hornearlas mantienen nuestra casa calientita 😀
Para elaborar la masa mezclamos los siguientes ingredientes secos:
- 4 tazas de harina
- 1 taza de azúcar moreno
- 1 cucharada de levadura en polvo
- 1 cucharadita de jengibre molido
- 2 cucharaditas de canela molida
- 1/4 cucharadita de clavo molido
Cuando estén bien revueltos agregamos:
- 1 taza de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 huevo grande
- 1/2 taza de miel o melaza
Amasamos todo muy bien, lo envolvemos en plástico y guardamos en el refrigerador por dos horas. Encendemos el horno a 180°C, estiramos la masa hasta 1 cm. de espesor sobre papel encerado y con moldes cortamos las galletas que iremos colocando en charolas engrasadas y horneamos de 12 a 15 minutos dependiendo del horno. Las sacamos del horno, dejamos enfriar y decoramos!
¿Qué fenómenos físicos y químicos tuvimos dentro del horno?
La transmisión del calor hacia las galletas es mediante radiación (si, similar a la radiación nuclear) por lo que dentro de cada galleta el calor induce básicamente tres estados en reacciones para expandir, endurecer la estructura y cambiar el color.
Durante la primer etapa que es la expansión la Ley de Charles y Gay – Lussac explica porque aumenta el volumen de un gas a presión constante cuando aumenta la temperatura, que en el caso de nuestras galletas la humedad de la masa al vaporizarse por el aumento de temperatura incrementa su tamaño “inflando” las galletas, lo mismo sucede con el pan pero que tiene mayor humedad.
En la segunda etapa de endurecer la estructura es la proteína del huevo junto con la harina las que coagulan o endurecen al perder su humedad mientras que la levadora absorbe agua para crear una estructura esponjosa.
El cambio de color en la etapa final con la reacción química de Maillard se explica como los aminoácidos junto con la reducción de azúcares genera colores en la superficie de las galletas desde amarillo, dorado hasta café o negro si nos pasamos de tiempo 😀