• dom. Dic 22nd, 2024

Globalización y mitos en matemáticas


 Resumen

En este ensayo se busca brevemente analizar como algunos mitos presentes en la educación matemática, algunos ya muy tradicionales y otros actuales, se ven reforzados por los medios de comunicación y sobre todo por contenidos extranjeros, que a efectos de la planetarización han llegado a nosotros. No se intenta de manera alguna determinar un juicio sobre estos, sino más bien propiciar reflexiones acerca de la mejor forma de aprovechar los medios y sus contenidos en nuestra práctica educativa.

La influencia de la globalización en la educación es desde luego muy productiva, ya que nos provee de muchos procedimientos y  tecnología aplicada, pero esta tecnología nos trae también los peligros de la operatividad sin conocimiento, por lo que se generan saberes y actitudes en función de la operación, es decir, nos llega el saber hacer, pero no sabemos que es y menos si queremos hacerlo.

Ahora, a mediados de la primer década de este siglo, nuestro micro sistema es modificado cada vez con mayor fuerza por el sistema exterior mas lejano a nosotros, sobre todo debido al acelerado proceso de cambio en las telecomunicaciones, que tienden a formar una aldea global que determina la moda de la forma de pensar y de valorar el equipaje o repertorio intelectual de las personas, los cuales quedan determinados por aspectos en ocasiones muy subjetivos, pero que son estimulados y legitimados por las corrientes culturales establecidas por las comunidades rectoras de la aldea global.

            Esta influencia que en forma de productos, teorías y mecanismos llega a nuestra aldea, lo hace sin que tengamos la preparación para ello y desde luego sin que nosotros hayamos creado algo.

            Lo anterior se observa en el área académica en el sentido de que obtenemos las teorías desde el exterior, no las creamos nosotros y en algunas de ellas no estamos capacitados para entenderlas totalmente en términos de relación práctica y teoría, queremos la libertad de elección que nos brinda la aldea global, pero también queremos el proteccionismo del estado, esto es, una democracia capturadora de responsabilidades, de tal forma que tomamos y adoptamos la democracia como modelo de gobierno pero no de vida, dejando incompleta esta práctica y teoría, porque ya que se ha distribuido el ejercicio de las decisiones y con esto del poder, se debe incluir también la responsabilidad que recae en dichos puestos.

            En el caso específico de la educación, en los últimos años se han generado modificaciones de conducta y de pensar en la comunidad educativa ya que los participantes son libres de expresar su opinión, pero no se hacen responsables de ellas porque no saben el origen de su forma de pensar, es decir, saben lo que piensan y en donde lo escucharon o leyeron, pero desconocen el origen de su ideología, esta dinámica agrega una dificultad mas a la práctica educativa, ya que ahora, antes de construir el nuevo conocimiento junto con los alumnos, es necesario eliminar primero las ideas previas que cada vez son mayores y mas resistentes por su origen, después propiciar que ellos generen sus propias ideas previas, pero correctas y solo entonces poder trabajar con la clase que corresponde al periodo cursado, esto es para que la edificación de las nuevas nociones sean sobre cimientos firmes y no en juicios tomados de los programas de televisión, que como ya sabemos hay alumnos que pasan mas horas viendo TV que en la escuela[1], convirtiéndose así para ellos en su realidad.

            En prácticamente todas las asignaturas se puede observar como los partícipes de la comunidad educativa hacen uso de ideas que vienen de fuera a efecto de la globalización, y que de alguna u otra forma se institucionalizan o “tradicionalizan” entre nosotros sin sustento, por ejemplo, el festejo del día de muertos, que es tradicional en el sur del país, se trajo a Sonora recientemente, y ha resultado en una mezcla de día de brujas con día de muertos y la festividad de Yom Kippur o confesión, otro ejemplo de que muchas de estas ideas vienen robustecidas por instituciones, es un anuncio en el que se recomienda mantener la puerta del refrigerador cerrada ya que se sale el frío, pero en realidad el frío no existe.

Reiterando, que no es la intención clasificar las bondades y deficiencias de estas y los siguientes fenómenos descritos, sino reflexionar acerca de la forma en que llegan a nuestras entidades y sobre como se implantan en la ideología de nuestra comunidad educativa, sin que nosotros conozcamos las ideas de lo que representan realmente.

            En lo que a matemáticas respecta, existe actualmente una generalización de ideas que no es nueva, pero que han tomado ímpetu gracias a los reforzamientos cotidianos de la publicidad externa, estas ideas previas han sido ampliamente estudiadas en el extranjero[2], pero en nuestra comunidad solo hemos recibido los efectos de esos mitos matemáticos.

            Algunos de estos mitos ya existían, como es el caso de que “Los hombres son mejores para las matemáticas que las mujeres”, ahora que antes era así pero para cualquier actividad profesional que alguna mujer hubiera deseado realizar, solamente podían efectuar actividades domésticas y generalmente solitarias o acompañadas únicamente de sus hijos y familiares mas cercanos, de tal forma que cualquier atisbo de actividad intelectual era castigado duramente por la sociedad, incluyendo en esta a las mismas mujeres. Actualmente existe la diferencia de que las mujeres pueden realizar en general todas las funciones profesionales y técnicas existentes, pero en los casos específicos de ciencia o matemáticas, se enfrentan a ser etiquetadas o estereotipadas como confeccionadoras de trabajos y estudios deficientes y carentes del rigor científico por una parte, y por otra parte como mujeres ajenas a la sensualidad y a la pasión, siendo esta última etiqueta la que mas influye en la decisión de las muchachas a la hora de seleccionar la carrera universitaria que estudiarán, escogiendo solamente de entre las que no tengan matemáticas, redefiniendo en cada generación el mito de que “Las matemáticas matan pasiones”. Estas ideas se ven reforzadas por los medios de comunicación, basta observar los anuncios de juguetes y las series de dibujos animados, en donde se excluye a las niñas y mujeres de la actividad científica y matemática y solamente se les posibilita para participar en aspectos de la moda o de plano relegadas a la función maternal, difícilmente veremos muñecas que sean investigadoras en topología, que sean exitosas y tengan un novio admirado y deseado por las demás muñecas, y esta situación pasa desapercibida para la gran mayoría ya sean alumnos o alumnas, es decir, tristemente son pocas las alumnas que reflexionan sobre el tema, y sobre todo es difícil para nosotros como docentes encontrar motivadores atractivos para ellas al recomendarles que decidan participar en concursos de matemáticas, menos aún si las exhortamos a estudiar alguna carrera relativa a las matemáticas o alguna carrera científica, uno de los motivos es que después son caracterizadas como poco femeninas[3] y que no lograrán alcanzar otra contribución de la globalización: el concepto de la super mujer.

            Otro mito muy arraigado es el de que “Algunas personas tienen mente matemática y otras no”, como se ha observado en diferentes películas, que causan una modificación en el ánimo de los jóvenes estudiantes, ya que si en apariencia no se identifican con el sujeto protagonista, entonces tampoco podrán igualarlo en lo que respecta a su habilidad matemática, de tal forma que reciben lo que consideran la apariencia de todo matemático, y como ellos no nacieron con ese aspecto, pues no podrán ser buenos para el ejercicio matemático, dicho de otra forma, los matemáticos nacen y no se hacen. Tomando en cuenta también las presiones que sobre la educación pública hacen los organismos internacionales y locales por los préstamos económicos y los resultados de las evaluaciones internacionales en matemáticas, lo que origina el ferviente deseo de elevar la calidad en la educación, pero se presenta una confusión y lo único que podemos elevar como docentes es la calificación, por lo que el nivel estándar de calificación es mayor, lo que hace que muchos alumnos tengan una asignación numérica de excelencia debido a los diferentes factores que se toman en cuenta para evaluar, que son importantes en la formación, pero que son ajenos a la educación matemática, entonces, los alumnos que no cubren los “otros” requisitos reciben una baja calificación en matemáticas y en la misma proporción baja también su auto estima, por lo que sienten que no sirven para las matemáticas y entonces disminuye el empeño en el estudio de las mismas.

            En cuanto a aquello de que “Los “matemáticos” no saben disfrutar de los deportes o bailes”, que también se ve cotidianamente como la representación de un sujeto desarreglado y antisocial, a quien solo interesa resolver problemas y vive en un mundo diferente a los “normales”, a dado lugar a que los alumnos rechacen la idea de estudiar matemáticas mas allá de lo requerido para acreditar la materia, ya que corren el riesgo de llegar a ser como el sujeto anteriormente descrito. Lo anterior en gran parte se debe a la nueva idea, que no se generó en nuestro contexto, de la aceptación social masiva o el “ser popular” como mencionan los alumnos que obtuvieron el vocablo de algunos programas, en donde los alumnos mas populares son saludados por todos sus compañeros aún desde antes de entrar a la escuela, además de ser tomado en cuenta para cualquier decisión y sobre todo llega a ser el rey o la reina del baile, desde luego que una persona que guste de las matemáticas o de la ciencia en general queda definitivamente excluido.

            El uso de las herramientas no electrónicas también reciben un carácter denostativo en esta era, el mito de que “Es malo contar con los dedos” cada vez está mas arraigado, ya que es común observar como se clasifica a las personas que cuentan con los dedos como “lentos” en el mejor de los casos.

            Vemos también en cualquier medio en que aparezca alguna historia de ciencia ficción, como al resolver algún problema técnico – matemático, todos se alegran y dejan la tensión por un lado, porque ya acabó lo difícil, es decir que “Las matemáticas se terminan cuando el problema queda resuelto”, entonces cuando los docentes queremos realizar un proceso dialéctico, de manera de que de un problema surja otro problema, nuestros alumnos ya no sienten ánimos de volver a concentrarse y enlazarse en un proceso de meta cognición.

El analfabetismo funcional matemático y tecnológico, que es el relativo a la masificación del uso de fórmulas e instrumentos para la resolución de problemas cotidianos, también ha sido una aportación de la planetarización, nos brinda la oportunidad de satisfacer nuestras necesidades numéricas, ha creado en nuestra comunidad una gran dependencia, hasta para calcular el cincuenta por ciento de alguna cantidad, similar al analfabetismo funcional, en donde las personas leen pero no entienden lo que significa, en este caso, las personas saben resolver problemas matemáticos, pero no entienden como, lo cual es funcional, pero limita el crecimiento intelectual.

En resumen, considero importante reflexionar y analizar las ideas que el actual proceso de globalización nos hace llegar, para poder llevar de la mano la práctica y la teoría y mejorar con esto la educación matemática.


[1][1] Influencia de la televisión en el cumplimiento de tareas y calificaciones de los alumnos.

Yeomans, O. Universidad del Noroeste, Investigaciones Educativas en Sonora, Volumen 3.

[2] “Mind Over Math,” McGraw-Hill Book Company, pp. 30-43.

Revised: Summer 1999, Student Learning Assistance Center (SLAC)
Southwest Texas State University

[3] “Muñecas o pistolas” Yadira Chacón, Revista Visión Educativa

Programa Editorial SEC Sonora, Diciembre 2002.


por Wenceslao Verdugo Rojas

Currículum en http://wmvr.org/trayectoria/